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El “crack” que hace jueguitos, sensación entre hinchas

ATRACCIÓN EN LAS PREVIAS. Se llama Wael William Riman, es de Líbano. Tiene 28 años y vino a trabajar a Qatar hace cuatro meses.

Sebastián Roggero Enviado especial a Doha

Cosas lindas y bellas pasan en cada previa del Mundial. Miles de hinchas llegan en metro a los estadios. Miles de hinchas se reúnen en las adyacencias de esas canchas cuyas estructuras y fachadas dan aspecto de una nave espacial aterrizada en el desierto. Y ahí mismo, miles de hinchas generan sus propias interacciones, de las que suelen surgir historias con peso propio.

Obvio que la Fifa dispone de ceremonias para que fans se sientan en una experiencia amplía de sensaciones. Por ejemplo, antes de cada partido y en cada estadio hay una banda que representa la música de cada país. Para Argentina, por ejemplo, suele haber un grupo de cumbia que entona temas conocidos y que, al mismo tiempo, versiona los hits de cancha. Y por supuesto que hay parlantes con bluetooth en los que revienta la canción “Hayya, Hayya”, que ya saturó a muchos.

Pero, se insiste, lo más lindo está en lo inesperado. Y lo inesperado son esos “locos” lindos que se meten entre la gente para mostrar sus habilidades. Desde un mimo, pasando por un Hombre Araña, hasta llegar al amo y señor de las previas: el que hace malabares con la pelota. Se llama Wael William Riman, es de Líbano. Tiene 28 años y vino a trabajar a Qatar hace cuatro meses.

“Lo mío es el entretenimiento. Es lo que me gusta hacer. Sacarle una sonrisa a la gente. Me vine de mi país porque allá no había muchas posibilidades de hacer esto que me gusta. El fútbol es popular, pero no tanto. Y este era un Mundial… pensé que podía ser bueno para mí”, le contó a La Voz antes de Marruecos-España, en el estadio Education City.

Fue impresionante cómo la gente le pedía videos y fotos. Y también saludos para algún pariente que estuviera lejos. Y él, cada vez que se lo pedían, agarraba su propia pelota, la que lleva a las canchas (también lo vimos antes de Francia-Polonia en el estadio Al Janoub), y lo hacía sin dramas.

Cuando se le referenció que La Voz era de Argentina, se emocionó. Como todos en Qatar. Decir Argentina aquí y en estos días provoca en una reacción positiva. “Messi, Maradona”, suena al mismo tiempo. Wael relató que trabaja en un bar de día y que, cuando son los partidos, se viene a los estadios. Y que después del bar y, si no hay estadios, sí “trabaja del entretenimiento”. Va a lugares en los que le pagan por hacer su show. No dio cifras sobre esa paga, pero avisó que es “poco”. “Estoy feliz de estar acá y hacer lo que me gusta. Tengo familia en mi país, mi madre, mi padre y un hermano. Planeo quedarme en Qatar hasta el final del torneo y quizá me salga alguna oportunidad para mi trabajo en el entretenimiento y seguir haciéndolo en otra parte del mundo”, anheló.

Su “trabajo en el entretenimiento” es bueno. Se nota que es bueno. Muy. Le salen bien los firuletes. Es tremendamente hábil haciendo “jueguitos”, dominando la pelota. Es notable cómo la gente se le pone alrededor y le llueven los aplausos al final. El martes, los marroquíes, tremendamente efusivos, lo abrazaban.

¿Quiso ser futbolista alguna vez? Sorprendió: “No, me gusta el fútbol, pero no como para jugarlo. Lo mío es esto, el entretenimiento”. Éxitos con eso, Wael William Riman.

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2022-12-08T08:00:00.0000000Z

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